(Europa Sur)
Juan Carlos Gómez es el nuevo entrenador xerecista
Hay elegido y se trata de Juan Carlos Gómez. El popular exfutbolista alcazó el éxito en los terrenos de juegos tras comenzar su andadura en el Iliturgi, recalando más adelante en el Córdoba y la cantera del Atlético de Madrid. Posteriormente, firmaría por el Atlético Marbella y regresaría al conjunto colchonero para aportar sus servicios al primer equipo, donde consiguió el hito de lograr un título liguero y una Copa del Rey en 1996.
Recaló en Pucela con el Real Valladolid y viajó hasta la capital andaluza para mostrar su mejor versión en el Sevilla FC; también se enrolaría en las filas del Getafe, Elche y Lucena CF, donde colgó las botas.
Tras finalizar su trayectoria como futbolista con un palmarés envidiable, decidió comenzar una nueva etapa en los banquillos. Su primera toma de contacto fue con el Ciudad Jardín, obteniendo el octavo puesto en Primera Andaluza.
Dio el salto a Tercera división llegando al Mairena como segundo entrenador de la mano de Rogelio Sánchez. No obstante, la mala racha de los sevillanos propició la destitución del técnico principal y el cordobés asumió la responsabilidad de dirigir la plantilla en la recta final de liga, pero no pudo evitar un descenso anunciado.
Es en el curso siguiente cuando se forja su figura al ser fichado por el Écija Balompié. Su primera temporada estuvo marcada por una cómoda décima posición en la última categoría nacional, con 14 victorias, 10 empates y 16 derrotas. La hazaña se produjo en su segundo año, logrando la tercera plaza y ascendiendo al Écija a Segunda B en el play-off, superando a rivales como SDC Durango, UD San Fernando y Olimpic de Xátiva.
Su primera experiencia en la categoría de bronce no pudo comenzar mejor. Después de un inicio impecable en el que los astigitanos fueron líderes durante varias jornadas, llegaron los problemas institucionales que lastraron la buena dinámica sevillana hasta el punto de que la directiva decidiese prescindir de los servicios del entrenador. Un posible escándalo de apuestas de futbolistas y algunas discrepancias visibles con los que eran sus rectores propiciaron tal decisión.
Recaló en Pucela con el Real Valladolid y viajó hasta la capital andaluza para mostrar su mejor versión en el Sevilla FC; también se enrolaría en las filas del Getafe, Elche y Lucena CF, donde colgó las botas.
Tras finalizar su trayectoria como futbolista con un palmarés envidiable, decidió comenzar una nueva etapa en los banquillos. Su primera toma de contacto fue con el Ciudad Jardín, obteniendo el octavo puesto en Primera Andaluza.
Dio el salto a Tercera división llegando al Mairena como segundo entrenador de la mano de Rogelio Sánchez. No obstante, la mala racha de los sevillanos propició la destitución del técnico principal y el cordobés asumió la responsabilidad de dirigir la plantilla en la recta final de liga, pero no pudo evitar un descenso anunciado.
Es en el curso siguiente cuando se forja su figura al ser fichado por el Écija Balompié. Su primera temporada estuvo marcada por una cómoda décima posición en la última categoría nacional, con 14 victorias, 10 empates y 16 derrotas. La hazaña se produjo en su segundo año, logrando la tercera plaza y ascendiendo al Écija a Segunda B en el play-off, superando a rivales como SDC Durango, UD San Fernando y Olimpic de Xátiva.
Su primera experiencia en la categoría de bronce no pudo comenzar mejor. Después de un inicio impecable en el que los astigitanos fueron líderes durante varias jornadas, llegaron los problemas institucionales que lastraron la buena dinámica sevillana hasta el punto de que la directiva decidiese prescindir de los servicios del entrenador. Un posible escándalo de apuestas de futbolistas y algunas discrepancias visibles con los que eran sus rectores propiciaron tal decisión.
La pasada campaña, Gómez Díaz no entrenó a ningún equipo a pesar de haber sonado con fuerza en el entorno del CD Martos.
Desde XCDNews queríamos profundizar sobre el nuevo entrenador azulino y nos pusimos en contacto con diversas fuentes de la prensa sevillana para obtener las referencias principales de Juan Carlos.
El primer término que utilizaban para definir al técnico cordobés era "trabajador nato". La constancia y el esfuerzo son sus premisas fundamentales. Considerado "todo un ídolo" en Écija, consiguió resurgir a la parroquia astigitana de sus cenizas y hacer soñar a toda la afición cuando logró el liderato del grupo IV de Segunda B.
Otro dato positivo añadido es que el preparador está curtido en escenarios complicados. Nos comentaban que "supo gestionar los problemas extradeportivos que rodeaban al Écija y, con recursos mínimos, ascendió al equipo cuando nadie lo esperaba". Agregan que, "como prueba de ello la mayoría de jugadores de aquella plantilla han seguido jugando en Segunda división B".
¿Cómo jugará el Xerez que se avecina? Pues, en cuanto a su método táctico, hemos podido saber que se caracteriza por "un juego muy vistoso que demuestra su valentía ante cualquier rival". En la mayoría de ocasiones, "optaba por un sistema táctico de tres defensas".
La última atribución reseñable de Juan Carlos Gómez es su temperamento. El cordobés siempre se ha esforzado por salvaguardar la disciplina en el vestuario y su última etapa en los banquillos estuvo marcada por la determinación que adoptó a la hora de "apartar de la plantilla a dos pesos pesados tras problemas internos en vestuarios", mostrando una jerarquía que favorece el respeto de sus respectivos pupilos.
De este modo, el Xerez CD acierta de pleno en la elección del capitán encargado de dirigir la nave azulina en el proyecto 19/20 que recién comienza a navegar.
Por Carlos López
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